Gerardo Fernández Noroña, actual presidente de la Mesa Directiva del Senado, salió en defensa del senador Adán Augusto López tras los recientes señalamientos que lo relacionan de forma indirecta con el grupo criminal conocido como “LaBarredora”. Durante una rueda de prensa, Noroña descartó categóricamente la posibilidad de que López Hernández abandone su papel como coordinador de la bancada de Morena en el Senado.
El legislador enfatizó que, mientras no existan pruebas contundentes que lo involucren legalmente, no hay justificación para removerlo del liderazgo del grupo parlamentario de Morena. “Adán Augusto es un gran operador político. Y está haciendo su tarea. Y la va a seguir haciendo. A menos que salieran evidencias contundentes”, aseguró el también senador.
Los cuestionamientos surgieron a raíz de la investigación contra Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad Pública de Tabasco, quien presuntamente mantenía vínculos con el crimen organizado. Sin embargo, Fernández Noroña subrayó que hasta que no concluya el proceso judicial contra Bermúdez Requena, no se puede atribuir responsabilidad directa.
El también dirigente de izquierda argumentó que existe una campaña mediática que busca desacreditar a Morena en el Senado, impulsada por sectores de la oposición. Según sus declaraciones, la derecha no se conforma con su salida de la presidencia del Senado y ahora pretende desplazar a Adán Augusto del liderazgo legislativo.
Además, aclaró que debe distinguirse entre responsabilidad política y responsabilidad penal. Nombrar a un colaborador implica cierto grado de compromiso político, pero no significa culpabilidad jurídica. En ese sentido, insistió en que no existen elementos legales para proceder contra el exgobernador de Tabasco.
Fernández Noroña finalizó señalando que los ataques contra Adán Augusto forman parte de una estrategia para desestabilizar al movimiento obradorista desde el interior del Congreso.
