Contraesquina Política.
Por: Fernando Martinez Plascencia.
Coatzacoalcos Ver., a 11 de agosto del 2025.

Jáltipan fue la sede donde nuevamente este par de sinvergüenzas, es decir, Juan Javier Gómez Cazarin, delegado federal de los Programas Sociales, y Esteban Bautista Hernández, Presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, se volvieron a enfrentar como los vulgares ambiciosos del Poder qué son, un par de cínicos qué se han enriquecido a costa de los más necesitados.

Resulta que el famoso “carón” un día antes del evento del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, y en el que el “zapatista” Esteban Bautista se vistió de indígena aunque ya no defiende ni representa la causa de este sector social, se puso a entregar-previa rasurada al padrón-las tarjetas de ayuda a la vivienda, con 40 mil pesos cada una, a las familias de Jáltipan y Chinameca, sin conocerse como los censaron, el chiste era boicotear.

Reducido políticamente, Esteban Bautista Hernández buscaba su lucimiento, pero vio su triste realidad, un hombre carente de todo liderazgo político, con su imagen tirada por los suelos, y si no hubiera sido porque la organización de la convocatoria de este evento corrió a cargo del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, y de Eucario de los Santos, el diputado hubiera hecho el mayor ridículo de su historia política.

Nadie, absolutamente nadie de su círculo cercano, llámese Francisco Ramirez, Raúl Athie, su comadre Alma Leticia Patiño, chalo Toledo, quien por cierto ya se siente candidato para la próxima elección municipal,-dicen los que saben que los más contentos serían los dueños de las cantinas-o la tal Maralieny Coli, o Iveth Martínez, la arrogante tesorera del congreso, tuvieron la capacidad política de realizar una buena convocatoria para dicho evento del “jefe”, es más, ni siquiera supieron que un día antes el corrupto de Cazarin estaba organizando el propio.

Por cierto, doña Iveth Martínez Hernández, a quien pronto-eso dicen nuestras fuentes-le cantarán la canción “Amarga Navidad”, llegó, vio y se marchó, no metió ni las manos, eso sí, en el desayuno con el diputado lució costosas prendas de la marca prada, gucci, chanel, lo mismo la sobrina del diputado, Patricia Gonzales Bautista, directora de Recursos Materiales del congreso, quien llegó ataviada al evento con ropa y zapatos de marca, tanto que muchos se atreven a decir que es la versión “andy López Beltrán” de Tatahuicapan y del sur de Veracruz.

Todos estos inútiles, sin oficio político, que rodean al “líder” de la Jucopo, son tan ineficientes que no pudieron llevar ni a su propia familia, y lo más grave, Mildred May, la ex candidata a la presidencia municipal de Jáltipan, y a quien Esteban Bautista apoyó en sus aspiraciones políticas en el pasado proceso electoral, con días de anticipación anduvo trabajando en contra de él, arropando al caron en su proyecto de desestabilización, y la gente del profe se quedó cruzada de brazos.

La cínica y perdedora candidata morenista, Mildred May, anduvo muy activa recorriendo las casas, preparando el acarreo para el evento de JJGC, con quien ya se entregó, diciéndole a la gente que el evento del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, encabezado por Esteban Bautista no tenía ninguna importancia, y que no fueran, que eran más importante las tarjetas de apoyo a las viviendas, y que habría más dinero para repartir.

El supuesto liderazgo de Esteban Bautista Hernández está en el cesto de la basura, su peregrinar por el sur de Veracruz, tratando de rescatar algo de su deteriorada imagen es vergonzoso, está convertido en el hazmerreír de este amplio corredor político, y es que el hecho de que este evento lo haya “organizado” en Jáltipan, y no en Tatahuicapan, nos dice mucho de su precaria condición política.

El presidente de la JUCOPO fue hecho añicos en el pasado proceso electoral, no pudo ganar ni en Tatahuicapan, su municipio, es una vergüenza porque ni en su casilla ganó, de ese tamaño es el rechazo a este falso líder que ha jugado con la confianza de la gente y se ha aprovechado de ellos.

No obstante, con la desfachatez que lo caracteriza, aparte de sus nulos resultados en el congreso donde no ha presentado ni siquiera una iniciativa, pretende nuevamente la diputación local, sin tomar en cuenta que el pueblo ya se dio cuenta que es un sediento del Poder y que solo busca sacar provecho para él y su familia.

Para que la cuña apriete, los habitantes de Tatahuicapan quieren llevar como su candidato, al alcalde de Tatahuicapan, Eusebio González Hernández, quien pacientemente ha construido su propio liderazgo, quien ha sido el único alcalde que le cerró las puertas del palacio municipal al presidente de la Jucopo para evitar el saqueo y la voracidad de quien ha perdido toda credibilidad política por su maldita ambición mezquina.

Por cierto, quien anduvo muy sonriente con todos es la próxima presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de diputados, Naomi Santos, a quien también le late su corazoncito por ser candidata a la diputación federal, no hay que olvidar que Jáltipan, Oluta y Oteapan, pertenecen al distrito federal de Minatitlán.

En fin, el “evento de” Esteban Bautista exhibió su falta de liderazgo político, ya que el presidente municipal de Jáltipan, Jesús Miguel Pérez Toto, no llegó ni mandó a nadie en su representación, tampoco hizo acto de presencia Gildardo Maldonado Guzmán, “el parcero”, quien días antes fue recibido y atendido en la Jucopo, el que sí llegó fue Guillermo Reyes Espronceda, alcalde electo de Minatitlán, y el electo de Agua Dulce, Ángel Delgado, así como el de Playa Vicente, Ramiro Martinez Amezcua.

Quién también llegó y no le fue nada bien porque recibió mentadas de madre-fuimos testigos-y rechiflas por parte de los ciudadanos, fue al alcalde de Chinameca, Ramiro Alemán, quien se fue muy arrepentido y casi llorando a su vehículo. Orale!!!

A Esteban Bautista, como al general de la novela de Gabriel García Márquez, no tiene quien le escriba, y lo que es peor, ni quien lo ayude, un hombre que ha cavado su propia tumba política ante tantos desatinos y errores políticos que mantienen a la gobernadora Rocío Nahle muy disgustada. Al tiempo.

De salida….

Se va Esaú Valencia de comunicación social del congreso, pero Esteban Bautista, quien lo ve como un “tío”, lo tendrá en la Jucopo, cerca de su equipo de trabajo.

Esaú Valencia, es un grande, y un buen amigo, aunque las circunstancias políticas nunca nos han permitido coincidir en nuestros quehaceres informativos, le deseamos éxito en todo lo que haga.