El incendio registrado en la sucursal Coppel reveló serias irregularidades en los protocolos de seguridad de la tienda, de acuerdo con el especialista en Protección Civil, Francisco Castillo Reyes.

El también exdirector de PC detalló que, al momento del siniestro, los hidrantes instalados no funcionaron, las bombas contra incendio permanecieron apagadas y la salida de emergencia no fue utilizada por los empleados ni clientes.

“Lo extraño es que sí se cuenta con esta infraestructura, pero el factor humano no activó el sistema de protección civil”, señaló.

La omisión generó que las llamas se propagaran con rapidez, obligando a bomberos y personal de auxilio a redoblar esfuerzos para sofocar el fuego, que provocó cuantiosas pérdidas materiales y pánico entre quienes se encontraban en el lugar.

Castillo Reyes advirtió que este caso expone un problema recurrente en comercios y oficinas, la falta de capacitación y protocolos claros para activar los sistemas de emergencia.

“De nada sirve invertir en infraestructura si el personal no sabe cómo o cuándo utilizarla”, dijo.

Se espera que se abra una investigación para determinar responsabilidades y verificar el cumplimiento de las normas de seguridad en el inmueble, razón por la cual Protección Civil recomendó a establecimientos reforzar simulacros y capacitaciones, con el fin de evitar que errores humanos conviertan un incidente en una tragedia.