A once años de la desaparición de su hijo, Manuel Cruz Domínguez denunció presuntos actos de corrupción y extorsión por parte de autoridades, a quienes acusa de aprovecharse del dolor y la desesperación de las familias que buscan interponer denuncias por desaparición forzada en Coatzacoalcos.

“Todos te timan cuando quieres interponer una denuncia”, expresó el señor Manuel Cruz Domínguez, quien desde hace más de una década mantiene la lucha por localizar a su hijo José Manuel Cruz Pérez, privado de la libertad durante el operativo conocido como Blindaje Coatzacoalcos.

El entrevistado afirmó que, en medio de la incertidumbre por no saber el paradero de sus familiares, muchas personas son víctimas de abusos por parte de servidores públicos, quienes presuntamente les solicitan dinero a cambio de iniciar o dar seguimiento a una carpeta de investigación.

“Cuando te sucede esto, no sabes qué puertas buscar, no sabes a dónde dirigirte y hasta la misma autoridad te tima; vas a fiscalía, quieres levantar una denuncia, te empiezan a pedir el dinero, que no tiene para la tinta, el taxi, para x, te piden que 200, 300, 400 y ahí se van, para levantarte una denuncia; cuando la quise hacer a nivel federal, porque la tenemos que hacer, en el Poder Judicial me timó un fiscal, me pidió 5 mil pesos, se los di, con tal de que procediera esa carpeta de investigación, todo mundo te tima”.

Al relatar las circunstancias de la desaparición, Cruz Domínguez recordó que los hechos ocurrieron durante una redada realizada en la avenida Constituyentes, en la que participaron elementos de corporaciones estatales como parte del operativo de seguridad implementado como Blindaje Coatzacoalcos.

“En una redada que hubo por la Constituyentes, esa famosa Blindaje Coatzacoalcos, llegaron a una casa a lado de la de mi hijo; mi hijo salió por la bulla que se hacía, porque llegó gente armada, en la que participó la Fuerza Civil y Policía del Estado a catear esas casas; mi hijo salió porque manejaba un taxi, pensé que le habían pegado a su unidad y ahí lo levantaron, hasta la fecha de hoy no sabemos qué hicieron con él”.

El padre de familia recordó que, al momento de su desaparición, José Manuel Cruz Pérez tenía 29 años de edad y apenas cinco años de haberse casado, lo que incrementó el impacto emocional y familiar que dejó su ausencia.

“A estas alturas no sé dónde está mi hijo, ya muerto; seguimos en la búsqueda, porque queremos encontrarlo aunque sea en una fosa, su osamenta, para darle sepultura, y también para apoyar a otros padres, porque los levantamientos siguen”, finalizó.