En medio del calor y el zumbido persistente de los zancudos, un hombre recorre las calles cargando a cuestas una bomba de fumigación. Se trata de Alberto Díaz, fundador del negocio local “Fedex Fumigaciones”, quien ha hecho de la lucha contra plagas una vocación y una forma de sustento.
Puerta por puerta, ofrece servicios de fumigación tanto para interiores como exteriores, con una promesa: garantía de hasta seis meses contra cualquier invasión de insectos o roedores.
El servicio que presta no es improvisado. Díaz cuenta con productos especializados para cada tipo de plaga: hormigas, zancudos, cucarachas, grillos, ratones, garrapatas, pulgas y hasta comején, son tratados con sustancias adecuadas,
COMPROMISO
siguiendo protocolos de seguridad para proteger a las familias. Su compromiso es serio, y así lo avalan los resultados que ha obtenido en comercios y hogares donde ha erradicado problemas persistentes.
Este tipo de emprendimientos ha comenzado a proliferar en Agua Dulce ante la falta de campañas de fumigación por parte de las autoridades de salud, especialmente en temporada de calor, cuando la presencia de zancudos se multiplica y con ello, el riesgo de enfermedades como el dengue, zika o chikungunya. “Si el gobierno no llega, llegamos nosotros”, comenta Díaz mientras llena nuevamente su equipo para el siguiente servicio.
En un contexto donde la prevención puede marcar la diferencia entre la salud y la enfermedad, la labor de personas como Alberto Díaz se vuelve esencial. Mientras las instituciones fallan, los ciudadanos se organizan, y en ese esfuerzo, negocios como este no solo generan ingresos, sino también tranquilidad y bienestar para las familias.