De acuerdo con Animal Político, el Gobierno de Claudia Sheinbaum ha dado un paso crucial en la investigación del caso Ayotzinapa al anunciar la creación de un nuevo grupo de investigación que priorizará el uso de tecnología y pruebas científicas para esclarecer la desaparición de los 43 normalistas.
Este equipo, liderado por la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), marca un cambio significativo en la estrategia para resolver uno de los casos más emblemáticos de violaciones a los derechos humanos en México.
Además, existe la posibilidad de que el expresidente Enrique Peña Nieto sea llamado a declarar si se recaban indicios que lo involucren, según informó Vidulfo Rosales, abogado de los padres y madres de los estudiantes desaparecidos, tras una reunión de dos horas y media con la presidenta y su equipo.
¿Qué se sabe del nuevo grupo de investigación?
El nuevo equipo de investigación tendrá como eje principal el análisis de la telefonía celular y otros datos relacionados con el caso. Esta estrategia busca depender menos de testimonios humanos, que pueden ser manipulables, y más de pruebas científicas y tecnológicas que ofrezcan mayor certeza.
Objetivos clave del nuevo grupo:
- Análisis de datos tecnológicos: Se priorizará el uso de tecnología para recabar y analizar información clave, como registros de llamadas, mensajes y ubicaciones.
- Expedientes del Ejército mexicano: Se buscará obtener documentos militares que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) y los familiares han señalado como fundamentales para avanzar en las investigaciones.
- Enfoque en pruebas científicas: Se dejará de depender exclusivamente de testimonios, que pueden ser inconsistentes, para centrarse en evidencia tangible y verificable.
Posible declaración de Enrique Peña Nieto
Uno de los aspectos más destacados de la reunión fue la posibilidad de que el expresidente Enrique Peña Nieto sea llamado a declarar si las nuevas investigaciones arrojan indicios que lo involucren.
“Se puso sobre la mesa ese tema y ella dijo que si este nuevo equipo de investigación, y si la tecnología arroja elementos de tal manera que se pueda llamar al presidente, se va a hacer”, afirmó Rosales.
Este anuncio representa un giro importante en el caso, ya que sería la primera vez que un expresidente sería citado a declarar en relación con la desaparición de los 43 normalistas.
Reunión clave entre familiares y el Gobierno federal
El diálogo entre los familiares de los 43 normalistas y el Gobierno federal se retomó con la llegada de la administración de Sheinbaum, luego de que en los últimos meses del gobierno de Andrés Manuel López Obrador la relación entre ambas partes se tensara. Durante la reunión, estuvieron presentes:
- Claudia Sheinbaum, Presidenta de la República.
- Rosa Icela Rodríguez, Secretaria de Gobernación.
- Arturo Medina, Subsecretario de Población, Derechos Humanos y Migración.
- Rosendo Gómez Piedra, Titular de la Unidad especializada para el Caso Ayotzinapa de la FGR.
Continuidad de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia
A la par del nuevo grupo de investigación, seguirá operando la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa (Covaj), que se instaló durante el sexenio de López Obrador. Esta comisión mantendrá su labor de garantizar el acceso a la justicia y la verdad para las familias de las víctimas.
Reacciones de los familiares
Tras la reunión, Emiliano Navarrete, padre del normalista José Ángel Navarrete, expresó que, aunque esperaban avances concretos, ven una disposición de la Presidenta para retomar las investigaciones.
Extradición de Tomás Zerón
Otro tema abordado fue la extradición de Tomás Zerón; Rosales no descartó ir a tribunales internacionales para que el extitular de la Agencia de Investigación Criminal testifique, ya que actualmente se encuentra prófugo en Israel.
El nuevo grupo de investigación representa un avance significativo en el caso Ayotzinapa, con un enfoque renovado en la tecnología y las pruebas científicas. Además, la posibilidad de llamar a declarar a altos funcionarios, incluido el expresidente Enrique Peña Nieto, abre una nueva etapa en la búsqueda de justicia para los 43 normalistas y sus familias.