Santiago Tuxtla, Ver., 1 de julio de 2025 — La paciencia llegó a su límite. Habitantes de diversos municipios del sur del estado, entre ellos Santiago Tuxtla, San Andrés Tuxtla y Ciudad Isla, anunciaron que bloquearán en las próximas horas la carretera estatal Santiago-Isla, en protesta por el abandono y deterioro que presenta esta vía de comunicación clave para el comercio y la movilidad regional.

Los inconformes, entre los que se cuentan transportistas, productores agrícolas y ciudadanos organizados, acusan al Gobierno del Estado de incumplir su promesa de rehabilitar completamente los 65 kilómetros de carretera, y señalan como un insulto la reciente reparación de apenas 200 metros en la desviación del Puente El Moztal.

Reproches a la administración de Rocío Nahle
A seis meses de iniciada la gestión de la gobernadora Rocío Nahle García, los pobladores reclaman que no se ha materializado la construcción de los 40 kilómetros de concreto hidráulico prometidos, ni se ha dado atención efectiva a las condiciones deplorables de la vía, llena de baches, deslaves y tramos intransitables.
“Cada día perdemos dinero, tiempo y seguridad en esta carretera. No queremos más discursos, queremos acciones concretas”, advirtieron.
Críticas a la diputada local
Los manifestantes también dirigieron severas críticas a la diputada local Liliana Castro Muñoz, a quien acusan de mantenerse ausente y callada frente a esta crisis de infraestructura que afecta a miles de familias. “No ha gestionado, no ha exigido, ni siquiera ha dado la cara. Está reprobada”, sentenciaron.

Asamblea y posible bloqueo total
Los inconformes anunciaron que se realizará una asamblea entre transportistas, productores y ciudadanos para definir las acciones a seguir. Si el Gobierno del Estado no ofrece una solución inmediata y creíble, procederán al bloqueo total de la carretera, una medida que, aseguran, es el último recurso ante la indiferencia oficial.
Este conflicto pone sobre la mesa el hartazgo creciente en diversas regiones de Veracruz, donde las obras públicas se anuncian con bombo y platillo, pero en la realidad los caminos siguen siendo trampas mortales para quienes los transitan cada día.