Las principales ciudades del norte de Veracruz han alcanzado un marcado progreso en las tareas de recuperación luego de las inundaciones de octubre. Según la Secretaría de Marina, los municipios de Poza Rica, Álamo Temapache, El Higo y Tempoal presentan avances de limpieza que oscilan entre el 75 % y el 93 %.
La mandataria estatal, Rocío Nahle García, informó que “a más de una semana de la contingencia … solo falta por reconectar a Ilamatlán y 31 comunidades más”.
Esto evidencia que la fase de saneamiento y limpieza —retirar lodo, escombros, vehículos dañados— está prácticamente concluida en los centros urbanos, lo que abre paso a las siguientes etapas de rehabilitación.
Maquinaria federal y-la conclusión de la limpieza
La presidenta Claudia Sheinbaum encabezó la conferencia matutina donde se detalló que, aunque “la limpieza concluyó en las principales ciudades y comunidades”, aún permanecen tres localidades sin acceso por vía terrestre. Las brigadas adscritas al Plan Marina participaron con más de 4 900 elementos, 117 máquinas, helicópteros, plantas potabilizadoras y equipos de gran escala.
En este sentido, el secretario de Marina, Raymundo Pedro Morales Ángeles, puntualizó: “El estado de Veracruz nos va a entregar 14 mil despensas adicionales … en total tenemos disponibles 30 mil paquetes para repartir conforme al censo”.
La coordinación federal-estatal mantiene activa la maquinaria para abrir los accesos que aún están obstruidos y garantizar que la limpieza no solo sea superficial, sino integral.
La presidenta dijo que las brigadas siguen entregando calles limpias a los municipios para retomar la recolección de basura. Explicó que se habilitaron centros temporales de acopio desde donde se trasladan los desechos a los rellenos sanitarios de cada región.
Tres comunidades aún incomunicadas y el reto de la red vial
Aunque gran parte del norte del estado ha sido intervenido, la cadena de acceso vial aún presenta brechas críticas. El boletín del gobierno estatal informa que “46 comunidades permanecieron incomunicadas durante varios días” y que se trabaja para restablecer paso en tramos rurales.
Por su parte, la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas del Estado (SIOP) detalló que en Álamo fue necesario emplear 27 retroexcavadoras, 30 camiones de volteo y unidades vactor para limpiar canales principales y liberar siete hectáreas inundadas.
La gobernadora Nahle declaró: “Yo me voy a encargar de recuperar Poza Rica y Álamo… Pero en este momento, lo más urgente es el rescate de nuestra gente en la sierra y continuar la limpieza”.
El restablecimiento de la conectividad es clave no solo para el tránsito sino también para el suministro de agua, servicios básicos, atención médica y el arranque de la reconstrucción.
Preparación para la etapa de reconstrucción
Con la limpieza avanzada, la estrategia se orienta hacia la rehabilitación de viviendas, infraestructura de agua potable, drenaje, escuelas y centros de salud. La reunión entre la mandataria estatal y el secretario de Marina revisó este plan de transición.
El programa estadal indica que más de 350 mil habitantes se beneficiaron con la rehabilitación de redes hidráulicas y drenajes entre Poza Rica y Álamo.
Las autoridades federales anunciaron que una vez entregados los apoyos emergentes —comedores móviles, despensas, atención médica— se dará paso a la reconstrucción con enfoque de resiliencia ante eventos hidrometereológicos.
La magnitud del desastre también se traduce en pérdidas económicas: en seis municipios del norte del estado, se estiman más de 10 000 comercios y empresas con afectaciones de distinto grado.
Este factor complica aún más la recuperación de la región, ya que no solo se trata de infraestructura pública sino de sustento para miles de familias.
Ante esto, el gobierno estatal ha habilitado refugios, cocinas móviles y centros de acopio para atender a las personas que perdieron su vivienda o negocio. En algunos casos, la inundación alcanzó hasta dos metros de profundidad en algunas colonias.
Retos pendientes y vigilancia en zonas de riesgo
El Atlas de Riesgos del Estado de Veracruz señala que la cuenca del río Cazones, que atraviesa municipios como Poza Rica, presenta alta probabilidad de inundación urbana y fluvial.
Ello implica que la reconstrucción debe incorporar mitigación de riesgos futuros, no sólo restauración de lo perdido.
Como lo expresó la gobernadora: “Equipos de Huayacocotla, Zontecomatlán e Ilamatlán… estamos concentrados” para restablecer la comunicación en la sierra donde la intervención es más compleja.
Las autoridades hacen un llamado a la ciudadanía para mantener la colaboración: limpiar espacios particulares, mantener desagües libres y atender las alertas meteorológicas en esta temporada de lluvias.
El gobierno federal y estatal enfatizan que la limpieza “ya prácticamente concluye en centros urbanos”, y que la siguiente fase es la reconstrucción. Para ello, la maquinaria, el personal y los apoyos están listos, pero la participación de la comunidad es esencial.
La presidenta Sheinbaum puntualizó: “La maquinaria federal sigue trabajando… no descansaremos hasta que todos los accesos queden abiertos”.


