Contraesquina Política.
Por: Fernando Martinez Plascencia.
Coatzacoalcos Ver., 5 de enero del 2025.

Ahora que la presidenta del Tribunal Superior de Justicia de Veracruz, Lizbeth Aurelia Jiménez Aguirre, anda como pepita en comal muy entusiasmada queriendo reelegirse por aquello de la recién aprobada reforma judicial, porque ya se lo prometió la gobernadora Rocío Nahle, debería poner atención, y por primera vez escuchar el clamor y las mentadas de madres de la comunidad jurídica, funcionarios y justiciables que se alzan como en coro de iglesia en su contra por tanta insensibilidad de su parte.

Los juzgados civiles, familiares, laborales y penales representan una verdadera vergüenza para quienes acuden a realizar sus trámites legales y jurídicos, y es que los abogados chocan entre sí, la mayoría de las veces son “tocamientos” inapropiados e involuntarios, y en donde las damas abogadas en dos o tres ocasiones han tenido altercados con algún varón por este tipo de cuestiones.

Todo se debe al hacinamiento en que se encuentran dichas “oficinas”, es decir, los espacios son pequeños, nada que ver con las suntuosas y majestuosas oficinas del TSJ en Xalapa qué anda promocionando el sinvergüenza y cínico Ciro Felix Porras, un prófugo priista, hoy ambicioso y vulgar morenista que quiere la presidencia de Minatitlán, y que ha propósito de la reforma, doña Aurelia lo puso a hacer unos anuncios estilo modelo “totalmente Palacio” en el máximo tribunal.

Por cierto, este sujeto que en tiempos de director del DIF escondía las despensas para sacar provecho político de la desgracia de las inundaciones, piensa que al pueblo de Minabaches ya se olvidó de toda la-presunta-corrupción de Lupe Porras, la mamá, quien siendo presidenta municipal ilusionó al pueblo con un puente que cruzaría a Capoacán y que nunca construyó, pero tanto el dinero de banobras como el de Pemex si “desapareció”. Ríos de tinta han corrido sobre este tema.

Este sinvergüenza de nombre Ciro Félix Porras, es además el flamante director estatal de Defensores de Oficio del Poder Judicial, un flojo y haragán que no arregla ni donde se acuesta, y es qué debido a su enorme ineptitud Coatzacoalcos no tiene un defensor desde hace más de 3 años, por lo que muchos presos al no tener quien los defienda por no tener dinero para pagar un abogado particular, siguen encerrados, violando sus derechos humanos, sin que a este inhumano sujeto le importe en algo la situación legal de estas personas.

Mientras este detestable sujeto duerme en una King Size con todas sus comodidades qué da el dinero fácil al cobrar un enorme salario por no hacer nada, come en los mejores restaurantes, y viaja a los mejores lugares del mundo, los presos, los que claman justicia y que alguien los escuche, ven cómo sus vidas tristemente se van apagando y consumiendo con cada segundo que transcurre detrás de las rejas de una prisión sin que nadie abogue por ellos.

En fin, los juzgados están peor que nunca, abandonados, y doña Aurelia, con ese enorme ego que la caracteriza, ya que la última vez que vino, de eso hace como un año, sin importarle qué abogados, jueces, secretarios, y actuarios la estaban esperando, soberbia, no fue digna de bajarse de la lujosa camioneta en que se transportaba, su secretario e íntimo amigo, David cerdeña, sólo les anunció a los funcionarios que la aguardaban qué a la jefa se le hacía tarde, y que si tenían espejo pues que ahí se vieran, porque la patrona ya se iba, y……se fue, hasta el sol de hoy no ha “regresado”. Ni regresará. Dijera teofilito.

Los baños de los juzgados de juicio oral también están destruidos, ni los propios funcionarios tienen a donde ir a hacer sus “necesidades”, olvídese de los abogados o justiciables o quienes acuden ahí, no tienen a dónde ir, el elevador está descompuesto desde que se instaló, una persona con alguna discapacidad no puede subir o bajar, no hay dinero ni para comprar cemento y pegar las tazas de los baños o los mingitorios, el escurridero de aguas negras inundan los pasillos de la fiscalía ya que se encuentran en el mismo edificio.

De verdad doña Lizbeth Aurelia, no le da vergüenza querer postularse nuevamente como magistrada presidenta del Poder Judicial, mientras los juzgados en Coatzacoalcos se caen a pedazos por el abandono en que usted los tiene?

Con qué cara. Por dios. Hay que ser cochinos pero no trompudos.

Ah, y eso que por aquí pasará, según, el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, una zona “destinada” a un gran crecimiento y desarrollo económico, anunciado a nivel nacional hasta por la propia gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, pero desgraciadamente, en los juzgados no sirven ni los baños para ir a echar una “cantada”. Valgame.

Se lo encargamos doña Rocío Nahle, recuerde que Coatzacoalcos es su casa y su tierra, y que de aquí salió, bueno, eso ha dicho usted. Queremos ver si es cierto.