Los carroñeros también están en Morena y en el congreso.
Contraesquina Política.
Por: Fernando Martinez Plascencia.
Coatzacoalcos Ver., a 30 de octubre del 2025.
La gobernadora Rocío Nahle ha dicho con cierta razón de que Veracruz no es carne para la carroña, señalando al mcprian de agitadores y de sacar provecho de la tragedia en Poza Rica y en municipios cercanos, ocasionada por las intensas lluvias que, si bien se alertó, por parte de Pemex a las 5 de la mañana del día de este impresionante suceso que cobró la vida de 34 personas,-y contando-no fue suficiente, sino más bien ineficiente.
Y es que, si desde el día anterior se hubieran habilitado los refugios, y se hubiesen evacuado a los habitantes de éstas colonias severamente afectadas, hoy no estaríamos hablando de tantas muertes.

Cierto, hay enojo de la sociedad, pero pedir la revocación de mandato en este momento no tiene razón de ser,-eso creo-por otro lado, los carroñeros no solo están en la oposición gobernadora, sino en su propio partido, en Morena, porque mientras usted está en “chinga” en la zona norte, a otros no les importó, ni les importa, mire, por ejemplo, la diputada Ingrid Calderón hasta de fiesta anduvo en la Vela Muxe en Agua Dulce, precisamente en esos días de la lamentable tragedia.


Por cierto, también eso de que se acabó el nepotismo de lo que tanto se quejaban de los prianistas, es una falsedad, esta diputada, qué goza de muchos privilegios, tiene en el congreso-nos dicen nuestras fuentes-en el área de servicios legislativos a su sobrina Estefanía Calderón.

Así como esta diputada, otros tantos legisladores tienen a sus parientes cobrando jugosos salarios por no hacer nada,-salvo excepciones-cuidando a los hijos de los funcionarios que los llevan a sus oficinas, mientras las esposas o esposos se entretienen jugando en la computadora, vamos, ya el congreso parece guardería. Caray.
En fin, los carroñeros están en todas partes, ahí están los del grupo de Esteban Bautista Hernández, Presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, quien en lugar de estar “enfocado” en el desastre de la zona norte, envía a su gente-un ojo al gato y otro al garabato-a municipios del sur para integrar los comités de MORENA, con la intención de imponer a los próximos candidatos a las diputaciones.
Pese al rechazo que se manifestó en las urnas el pasado mes de junio donde el “jaguar” perdió todos los municipios de su distrito, incluyendo su municipio, Tatahuicapan, ahora se da a la tarea de querer apropiarse de una parte de la estructura o padrón-aunque dicho padrón no es confiable-partidista, sin importarle que la gobernadora Rocío Nahle necesita todo el apoyo para “reconstruir” a la zona norte.


Tipos sin oficio político como Tomás Gayoso fue enviado a Soconusco, el bueno para nada de Raúl Athié a Cosoleacaque, en donde en la pasada elección ni su familia votó por él, imagínese, y en Jáltipan llegó Maralieny Coli, todos estos personajes son funcionarios del congreso haciendo tareas de Partido en horarios laborales, cuando mejor deberían estar allá en Poza Rica, ayudando a la gobernadora Rocío Nahle.
II. –
En las cañerías qué lleva la suciedad cayó la mayoría morenista del congreso al haber aprobado la cuenta pública del nefasto ex gobernador, Cuitláhuac García Jiménez, varios miles de millones quedaron en simples observaciones, hoy los legisladores se convirtieron en cómplices del desfalco y el robo a los veracruzanos.



La Auditoría Superior de la Federación había dado cifras de varios miles de millones de pesos, 2 mil aproximadamente, el dictamen técnico del Órgano de Fiscalización que dirige Delia González Cobos confirmó el daño patrimonial donde también están muchos municipios, dictamen qué los magos de Miguel Pintos Guillen en la Comisión de Vigilancia, se encargaron de maquillar, y que el orfis validó.

Aquí viene lo bueno, porque muchos municipios como en el pasado, tendrán que caerse con su “mochada” después de la limpia a sus Cuentas Públicas, y hasta donde se sabe, el operador de las carretadas qué se pretenden recoger al cash, es un tal Edmundo Macario, gente de confianza del diputado Miguel Pintos, quien es el encargado-nos dicen nuestras fuentes-de dicha operación. Al tiempo.

 
                       
                         
	
 
						 
						