Contraesquina Política.
Por:Fernando Martinez Plascencia.
Coatzacoalcos Ver., 22 de enero del 2025.
La Contraloría General del Estado, cuyo titular es Ramón Santos Navarro, un sujeto que llegó recomendado y acuerpado por un grupo de empresarios, está convertida en el Cueva de Alí Babá y los 40 ladrones.
La contraloría es un cochinero qué protege y le da trabajo a detestables personajes prianistas que fueron el linchados en el discurso político de MORENA por medio de la hoy gobernadora Rocío Nahle, fueron señalados de corruptos, ladrones que saquearon a diestra y siniestra en los cargos públicos que ocuparon, y que no tendrían cabida en ningún gobierno, y menos en el de la “Cuarta transformación”.
Hay un dicho que dice que el que escupe para arriba le cae la saliva y eso es lo que hoy le está pasando a este gobierno qué presumió de ser diferente, pero que en la práctica han resultado peores.
Para no ir más lejos, aparte de Sandy Astrid Ulloa,- de quien ya hablamos en columna anterior-la ex titular del Registro Público en Coatzacoalcos, nombrada por Miguel Ángel Yunes Linares, y actual coordinadora de asesores de la Contraloría donde despacha Santos Navarro, señalada de actos de corrupción en lonas y mantas por distintos rumbos de la ciudad.
Junto al otro sinvergüenza,-de quien también ya hablamos en columna anterior-hoy Asesor de la Contraloría en Palacio de gobierno, Daniel Lugo Carrasco, quien en los diferentes cargos que ocupó dentro de la Secretaría de Educación en la época duartista, fue despedido por corrupto, con una muy mala imagen pública, cosa que no fue suficiente para no darle trabajo pese a sus antecedentes de ladrón, aparte de estos dos, aún hay más, dijera Raúl Velasco.
Se trata de Ricardo José Castelo Gonzalez, quien fue nombrado por Ramón Santos Navarro, como Encargado del Órgano Interno de Control en la Secretaría de Gobierno,-hijo de un ex líder petrolero y quien fue alcalde de Nanchital,-este panista fue funcionario en el gobierno de la ex alcaldesa de Nanchital, Zoyla Balderas.
Este personaje no arregla ni donde se acuesta, como director de desarrollo social nunca demostró capacidad política en el cargo, en pocas palabras no tuvo buen desempeño, y le causaba muchos problemas a la hija del bien recordado Francisco, chico balderas, este personaje nada más se la pasaba aplastado en el sillón, cobrando un salario qué no desquitaba.
El otro sujeto, que ahora es el Encargado del Órgano Interno de Control de la Secretaría del Medio Ambiente, se llama Cesar Aurelio Garrido Kim, un panista, funcionario también del gobierno de Zoyla Balderas donde fue el Contralor, que gastaba a manos llenas el dinero en los mejores restaurantes de Xalapa, todo con cargo al erario público, nefasto, tuvo muy malos manejos e infinidad de irregularidades qué aún le siguen costando a la ex alcaldesa.
Este par de sinvergüenzas panista son la nueva adquisición de Ramón Santos Navarro, y ahora gozan de los privilegios de la 4T, cobrando salarios por arriba de los 50 mil pesos mensuales, y en donde al parecer la gobernadora, Rocío Nahle, no está enterada, y si lo está, tantito peor.
Por si esta burla no bastará, el titular de la Contraloría, Ramón Santos Navarro, quien presume de ser muy “humanista”, rescató de la banca a Ana Guadalupe Alcántara Almeida, una-hasta donde se sabe-ex funcionaria del itesco muy allegada al ex director Bulmaro Salazar Hernández, quien está siendo investigado por presunta corrupción y daño patrimonial por más de 57 millones de pesos, además de estar denunciado-C.I.190/2023-en la agencia especializada por acoso y violencia contra varias mujeres trabajadoras de dicha institución.
La llegada de una nueva administración al Tecnológico de Coatzacoalcos puso de patitas en la calle a Bulmaro, y al séquito de privilegiados, entre ellos, a doña Ana, pero Ramón Santos Navarro, muy acomedido, viéndola “desprotegida”, se compadeció, e inmediatamente se la llevó a Xalapa, y la nombró Jefa del Departamento de Recursos Materiales y Servicios Generales, ahí donde se llevan a cabo todas las compras, contratos y licitaciones.
Por ello, y a propósito del decálogo enviado a los Secretarios del gabinete por la gobernadora, donde pueden quejarse con ella si no los atienden o escuchan, pues mire, los que verdaderamente se rajaron el lomo en campaña a ras de suelo, con lluvia o sol, soportando las inclemencias del tiempo, pasando hambre, los verdaderos fundadores y militantes de MORENA, siguen esperando que alguien los escuche, los llame, y les reconozcan el titánico trabajo político que llevó a Rocío Nahle, a diputados federales y locales, a ocupar los cargos que hoy tienen. Sería lo justo. No?





