Un avión Boeing 737-800 de American Airlines se convirtió en escenario de una emergencia cuando una de sus turbinas estalló en llamas tras aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Denver, Colorado.

La aeronave, procedente de Colorado Springs y con destino a Dallas-Fort Worth, se encontraba estacionada cuando las llamas y una densa columna de humo negro alarmaron a pasajeros y personal aeroportuario.

Las 178 personas a bordo, entre ellas seis miembros de la tripulación, fueron evacuadas de inmediato mediante toboganes de emergencia, mientras equipos de rescate del aeropuerto trabajaban para sofocar el fuego.

En videos difundidos en redes sociales se observa a los pasajeros descendiendo apresuradamente, algunos incluso sobre el ala del avión, mientras el humo se intensificaba.

American Airlines confirmó que el incidente se debió a un “problema relacionado con el motor”, aunque hasta el momento no se ha determinado la causa exacta del incendio. La aerolínea aseguró que a todos los ocupantes se les trasladó a la terminal sin que se reportaran heridos.

El incidente reaviva la preocupación sobre la seguridad en la aviación comercial, en especial en modelos como el Boeing 737-800, que ha estado bajo escrutinio en los últimos años.

La Administración Federal de Aviación (FAA) y el Aeropuerto Internacional de Denver aún no han emitido declaraciones oficiales sobre el caso.

Mientras tanto, los pasajeros, que pasaron de un vuelo rutinario a una situación de alto riesgo en cuestión de minutos, agradecen la rápida respuesta de la tripulación y los equipos de emergencia.