Exportaciones mexicanas alcanzan récord históricos hacia EE. UU. en 2024
En un contexto político tenso entre México y Estados Unidos, las exportaciones mexicanas hacia su principal socio comercial lograron un récord histórico. Datos oficiales muestran que, solo en septiembre, las exportaciones alcanzaron 44,155 millones de dólares, un aumento del 11.7% en comparación con el mismo mes del año anterior. Este crecimiento consolida a México como el principal proveedor de productos para el mercado estadounidense, superando incluso a China, y representa un 15.4% del total de las importaciones de EE. UU.
Sin embargo, en medio de este logro, surge una nueva amenaza por parte de Donald Trump, candidato republicano a la presidencia de EE. UU. Durante un reciente evento en Carolina del Norte, Trump advirtió que de ganar las elecciones impondría aranceles a México si no controla el flujo migratorio y el tráfico de drogas hacia Estados Unidos. Estas declaraciones han generado incertidumbre entre empresarios y autoridades mexicanas, que ven en este comercio un pilar esencial para la estabilidad económica del país.
Trump y sus amenazas de aranceles: Una estrategia de presión migratoria
Trump ha reiterado que aplicará una política proteccionista de aranceles que podría alcanzar hasta un 100% si considera que México no colabora en detener la migración ilegal. En un discurso reciente, mencionó que impondrá aranceles del 25% a productos mexicanos, incrementándose hasta 50%, 75% o incluso 100% si considera que la situación no mejora.
“Ahora tenemos una nueva presidenta en México. No la conozco, pero le diré que si no detiene esta avalancha de criminales y drogas que entran a nuestro país, voy a imponer inmediatamente un arancel del 25% a todo lo que están enviando a Estados Unidos,” declaró Trump. La propuesta inquieta a diversos sectores, ya que el 80% de las exportaciones mexicanas dependen del mercado estadounidense y, en caso de imponer aranceles, los costos podrían repercutir gravemente en la economía mexicana.
¿Por qué los productos mexicanos son clave para el mercado estadounidense?
La cercanía geográfica, el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y la mano de obra competitiva han convertido a México en un socio esencial para Estados Unidos. Productos como automóviles, electrodomésticos y maquinaria representan buena parte de las exportaciones de México, esenciales para la economía estadounidense.
Además, el proceso de “relocalización” de empresas de Asia hacia México ha permitido que el país capte inversiones extranjeras y refuerce sus vínculos comerciales con EE. UU., incrementando la competitividad de la región. Al beneficiarse de esta relocalización, las exportaciones mexicanas aumentan en sectores estratégicos como la industria automotriz y la manufactura avanzada, fortaleciendo las cadenas de suministro en América del Norte.
T-MEC: El acuerdo que respalda la relación comercial y protege el Libre Comercio
El T-MEC, sucesor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ha sido fundamental para mantener estable la relación entre México y Estados Unidos. Sin embargo, las recientes amenazas de Trump de revisar o modificar el tratado generan dudas sobre el futuro de las exportaciones mexicanas, especialmente en industrias de alto valor agregado.
En 2026, el T-MEC podría entrar en una etapa de renegociación, y Trump ha dejado entrever su intención de replantearlo si llega a la presidencia. Durante un evento en Michigan, aseguró que impondría aranceles a autos importados desde México que contengan partes chinas, un cambio que afectaría severamente a la industria automotriz mexicana. Estas declaraciones crean un ambiente de incertidumbre, ya que las modificaciones al tratado no solo podrían impactar la economía mexicana, sino también elevar los precios de productos en Estados Unidos y afectar las cadenas de suministro integradas en la región.
Las repercusiones económicas de las amenazas de Trump para México
Las amenazas de aranceles preocupan a empresarios mexicanos que dependen de exportaciones hacia EE. UU., pues un aumento en los costos podría afectar la competitividad de los productos ‘Hecho en México’. Los aranceles propuestos por Trump podrían traducirse en precios más altos para los consumidores estadounidenses, quienes encontrarían productos mexicanos menos accesibles en el mercado. Esto afectaría no solo la economía mexicana, sino también a los importadores y distribuidores de Estados Unidos que dependen de insumos y productos terminados provenientes de México.
Además, el riesgo de una guerra comercial es real. Las importaciones mexicanas en EE. UU. están profundamente integradas en las cadenas de suministro norteamericanas, especialmente en sectores como el automotriz y el agrícola. Al encarecer los productos mexicanos, ambos países podrían enfrentar consecuencias económicas graves que dañen la relación comercial en su conjunto.
Respuesta de México y acciones frente a las amenazas
Ante estas advertencias, la presidenta Claudia Sheinbaum ha destacado el trabajo de México para controlar la migración. A través de su diplomacia, México buscará fortalecer su posición en el T-MEC y evitar que estos temas afecten el comercio bilateral, defendiendo los intereses comerciales y resaltando los beneficios de la integración económica.
Las autoridades mexicanas planean también fortalecer las relaciones comerciales con otros mercados, diversificando sus exportaciones hacia Asia y Europa, y reduciendo así su dependencia de Estados Unidos. Esto no solo permitiría al país protegerse ante posibles políticas proteccionistas, sino también garantizar una estabilidad económica de largo plazo.