El gobierno de Guatemala concedió a la justicia mexicana la autorización necesaria para formular nuevas imputaciones contra Javier Duarte de Ochoa, ex gobernador de Veracruz, actualmente preso en el Reclusorio Norte. Con ello, la Fiscalía General de la República (FGR) avanzó en la judicialización de una nueva carpeta de investigación relacionada con presuntos desvíos de recursos federales durante su administración, de diciembre de 2010 a octubre de 2016.

De acuerdo con autoridades federales, el expediente —integrado a partir de denuncias presentadas desde 2016— abarca irregularidades en el uso de fondos destinados a insumos de salud, obras públicas y otros programas, recursos que presuntamente fueron desviados durante el gobierno de Duarte.

La audiencia no se realizó: Duarte argumentó enfermedad


La FGR promovió la judicialización del caso la semana pasada, y un juez federal fijó fecha para la audiencia inicial. No obstante, la defensa del ex mandatario informó que Duarte no podría comparecer debido a que se encontraba enfermo de covid-19, por lo que la diligencia no se llevó a cabo.

Guatemala debía autorizar nuevos cargos


La solicitud a Guatemala era indispensable para proceder legalmente. Duarte fue detenido en ese país en 2017, y conforme a los tratados internacionales sobre extradición, México no podía imputarle delitos adicionales a los que motivaron su entrega sin autorización expresa de la justicia guatemalteca.

El ex gobernador fue capturado el 15 de abril de 2017 en el hotel La Riviera de Atitlán, en Panajachel, luego de haberse dado a la fuga en octubre de 2016, días antes de concluir su mandato. Tras rechazar entregarse voluntariamente, Guatemala aprobó su extradición el 17 de julio de 2017. Desde entonces permanece preso en el Reclusorio Norte.

Sin beneficios: juez niega libertad vigilada


En semanas recientes, su defensa intentó que Duarte pudiera cumplir en libertad vigilada los cuatro meses restantes de su condena vigente; sin embargo, la jueza de control Ángela Zamorano Herrera negó el beneficio. Argumentó que el ex gobernador aún enfrenta un proceso por desaparición forzada, delito que continúa abierto, y además no acreditó haber cumplido con el plan de actividades educativas y recreativas requerido en el penal.

Con la nueva autorización de Guatemala, la FGR se prepara para continuar el proceso y determinar si Duarte enfrentará ahora un nuevo juicio por los desvíos federales señalados.