Con fe y devoción, católicos iniciaron la fiesta mayor de Catemaco, que es en honor a la Virgen del Carmen, quien tiene un templo en esta ciudad y un sitio, donde se dijo, apareció un 16 de julio de 1664 a un pescador de la misma comunidad veracruzana.
El inicio del festejo fue con lo que ya se volvió una tradición, que es el paseo acuático de la imagen de la Virgen, que fue bajada de la parroquia local hasta el muelle y subida a una de las lanchas que comúnmente ofrecen recorridos a puntos turísticos de la laguna, y que fue adornada especialmente para recibir a la llamada Virgen del Volcán y patrona de los pescadores catemaqueños.
Decenas de feligreses, encabezados por el obispo de la diócesis, José Luis Canto Sosa, acompañaron a la lancha que llevaba la imagen en otras embarcaciones similares, y en medio de cantos y oraciones, visitaron cada una de las ocho congregaciones locales que se ubican a orillas de la laguna.
Esta procesión se hace desde hace cinco años y se ha convertido en una tradición que atrae a católicos locales y de otros lugares cercanos.
La emotividad de la fe que genera la imagen de la Virgen, se convierte en fiesta por cada comunidad visitada, cuyos pobladores ofrecen bebidas y comida a quienes acompañan en su trayecto al busco de la llamada tambien, “madre del Tegal”.
Con esta actividad, inician las fiestas en honor a la Virgen Carmelita, que durarán hasta el 17 de julio y tendrá como fecha principal, el 16 de este mes.